En el contexto de las denuncias presentadas vía correo electrónico y telefónico al diputado del movimiento UNIR, Marcelo Díaz, sobre el aumento de delitos de robos, asaltos y comercio de drogas en algunos barrios de Valparaíso y Viña del Mar, especialmente en la parte alta de estas comunas, el parlamentario llamó esta mañana al intendente Jorge Martínez a disponer de buses de acercamiento domiciliario para los trabajadores de la salud que cumplen turnos de noche y madrugada en los hospitales Carlos van Buren y Gustavo Fricke, ante la emergencia sanitaria que afecta al país por la pandemia de la COVID-19.

Es más, el legislador afirmó que estos actos delictivos “incluso se producen en los alrededores de estos centros asistenciales, lo que me parece gravísimo. Esta información me la confirmó el concejal (de Viña del Mar) Sandro Puebla, quien aseveró que fueron los propios funcionarios los denunciantes”.

“Tales hechos —agregó Díaz— han tenido ocurrencia, particularmente, por las noches, aproximándose la hora de toque de queda o durante la vigencia dicha restricción; y han afectado a personal de la salud que cumple el último turno en dichos establecimientos, cuando se retiran con destino a sus domicilios en un horario en que las posibilidades de movilización y transporte son más limitadas dadas las actuales circunstancias”.

MEDIDA DE APOYO

Ante esta situación, el diputado de UNIR dijo que “he recibido una propuesta del concejal Sandro Puebla, en orden a disponer de buses de acercamiento domiciliario para dichos funcionarios. En atención al enorme esfuerzo que el personal de los hospitales está haciendo para enfrentar la pandemia sanitaria que vivimos, me parece que es una medida muy válida y necesaria, y sería una expresión concreta de apoyo y agradecimiento para quienes están en la primera línea de lucha ante este virus que nos aflige”.

Por lo anterior, concluyó, “solicito al intendente considerar esta medida, con recursos del Gobierno Regional”.