Con un operativo de limpieza realizado en la población Hacienda Quilpué, de San Felipe, Esval continúa avanzando en su Plan Invierno 2021, iniciativa que se enmarca en el programa anual de Mantenimiento Preventivo de redes de recolección de aguas servidas, que ejecuta la sanitaria.

Durante este año, el programa contempla la mantención de más de 54 kilómetros de la red de alcantarillado -en las provincias de San Felipe y Los Andes-, con especial foco en los meses de invierno, donde abarcará más de un tercio del total anual.

“El objetivo de este trabajo preventivo, que iniciamos hace varios meses, es garantizar la continuidad y calidad del servicio de recolección de las aguas servidas, junto con prevenir emergencias propias de este periodo, donde el sistema se ve impactado por la incorporación de aguas lluvias, basura y otros desechos que terminan obstruyendo la red. Es una iniciativa que forma parte de nuestro programa de mantenimiento anual, donde abarcaremos una extensión total de 320 kilómetros de colectores en la región, con una inversión que supera los $500 millones”, dijo el subgerente zonal de Esval, Rodrigo Lastra.

Prácticamente 9 de cada 10 obstrucciones o rebases en la red de aguas servidas se producen por el mal uso del sistema. En ese sentido, las principales recomendaciones son: no conectar los ductos de evacuación de aguas lluvias al alcantarillado, ya que el caudal puede sobrepasar la capacidad del colector; juntar las hojas y basura en los lugares indicados, con el fin de prevenir colapsos; no abrir tapas de cámaras para evacuar las aguas lluvias; y evitar arrojar toallas húmedas, mascarillas, pañales u otros residuos a través del WC, ya que eso puede obstruir el sistema, afectando su funcionamiento.